Un buen destino es que dos personas se encuentren cuando ni siquiera se estaban buscando.
Necesitar a alguien y que ese alguien nunca esté para ti.
— Amor, ¿qué es lo que más te gusta de mi?
— Tus tetas.
— ¿Puedes ser
más romántico?
— Me gustan las tetas que guardan tu hermoso corazón.